HACIA UNA NUEVA ORGANIZACIÓN ADMINISTRATIVA (II)

17.01.2013 17:00

 

 

                      A partir de la Disposición transitoria tercera del Anteproyecto de Ley de 22 Diciembre 2012, es donde se comienza a tratar el tema de las Juntas Vecinales, un tema que afecta esencialmente a León, ya que el 80% de todas las existentes en el país, se encuentran ahí.

 

“Las Entidades de ámbito territorial inferior al Municipio existentes en el momento de la entrada en vigor de la presente ley que no presenten sus cuentas ante los organismos correspondientes del estado y de la Comunidad Autónoma respectiva, se disolverán por decreto del órgano de gobierno de la Comunidad Autónoma respectiva”

 

                        Las Juntas Vecinales no desaparecerán, sólo lo harán aquellas que no cumplan la ley, que no presenten sus cuentas en tiempo y forma. Dicho de otra manera, una junta vecinal, sobrevivirá, si quiere, y cumple con la normativa vigente. Con esto, terminamos con el populismo barato que ha invadido nuestras redes sociales y medios de comunicación, de que  se acabará con las juntas vecinales.

                        Para seguir acabando con propaganda engañosa, desmentiremos también el rumor existente de que la Junta de CYL o la Diputación se quedarán con los bienes y terrenos, propiedad de aquellas juntas vecinales, que no cumpliendo la normativa referida a la presentación de cuentas, se disolverán.

 

-           “El personal que estuviera al servicio de la entidad disuelta quedará incorporado en el Ayuntamiento en cuyo ámbito territorial esté integrada”.

-           “El Ayuntamiento del que dependa la entidad de ámbito territorial inferior al municipio queda subrogado en todos sus derechos y obligaciones”.

 

                        Ni a la Junta, ni a la Diputación, pasarán a formar parte del Ayuntamiento correspondiente, el cual se hará cargo además de sus derechos y obligaciones.

                        Como resumen, diremos que este anteproyecto incorpora  a la ley, una serie de matizaciones necesarias como la redefinición de competencias, la delimitación de los servicios, y especialmente el seguimiento exhaustivo de la prestación de los mismos, para garantizar su adecuación, eficiencia y eficacia.

                        Además, extiende ese estudio de la prestación de servicios a las mancomunidades, y exige por primera vez, cierta seriedad, a la hora de presentar las cuentas en tiempo y forma, a las juntas vecinales.

                        Por mi parte, diré que estoy a favor de lo que supone este anteproyecto, porque cumple con dos premisas básicas, “No tocar lo que funciona”, y “Simplificar lo que antes llevaba a equivocaciones (duplicidades), como son los servicios y competencias de cada Administración”.